La Paz de Westfalia sentó las bases de las relaciones internacionales

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La Paz de Westfalia sentó las bases de las relaciones internacionales

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Autor: Janet Queffelec Padrón (Periodista)

Hace 373 años en una región al noroeste de Alemania, lo que hoy es el estado federado de Renania del Norte-Westfalia, surgieron los principios de soberanía, integridad territorial y Estado, así como los fundamentos que rigen el derecho internacional y la diplomacia.

Se trata de la Paz de Westfalia, proceso que se realizó en el transcurso de cinco meses con la firma de dos sendos tratados: el de Münster el 15 de mayo de 1648 y el de Osnabrück el 24 de octubre de ese mismo año.

Otro de los aspectos más significativos es que la Paz de Westfalia fue determinante para la configuración de un nuevo orden territorial en Europa y, siglos más tarde, de la conformación de los 16 estados federados que componen a Alemania en la actualidad.

Asimismo, fue la génesis del mecanismo de negociación para la resolución pacífica de los conflictos.

Por todo ello, es indudable que los principios westfalianos han inspirado la creación de organismos multilaterales que surgieron tras la Segunda Guerra Mundial, como es el caso de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), así como las bases del derecho internacional que se han reflejado en la Carta de las Naciones Unidas.

Dos guerras llegaron a su fin

Para el año 1648, tenía lugar la Guerra de los Treinta años, en lo que hoy es el territorio alemán, con el enfrentamiento entre católicos y protestantes, pero que involucró además a Francia y Suecia.

El emperador del Sacro Imperio Romano Germánico, Fernando III de Habsburgo, quien era católico, tuvo como aliado a España en su lucha contra Dinamarca, Suecia, la Provincia Unida de Países Bajos y Francia.

Aunque Francia profesaba la religión católica, se involucró en la guerra para contener el poder del imperio alemán en Europa Central, lo que le permitió además extender sus dominios a Metz, Verdún, Alsacia, Lorena y Breisach.

Al cabo de tres décadas de enfrentamientos, se firmó el Tratado de Münster el 15 de mayo de 1648 mediante el cual la Provincia Unida de Países Bajos logró su independencia de España. En el documento se hablaba de soberanía, tal y como señala el texto que indica que el Rey de España Felipe IV “declara y reconoce que los dichos Señores Estados Generales de los Países Bajos Unidos y las Provincias de ellos respectivamente, con todos sus Países asociados, Ciudades y Tierras de su pertenencia, son Estados, Provincias y Países libres y Soberanos, sobre los cuales, ni sobre sus Países, Ciudades y Tierras Asociadas, como se ha expresado, el dicho Señor Rey no Pretende nada”.

Igualmente, el emperador del Sacro Imperio Romano Germánico se vio forzado a reconocer la autonomía de los 350 estados, formándose una confederación.

A su vez, Suecia consolidó su dominio en el Mar Báltico, mientras que Suiza se independizó del Sacro Imperio Romano Germánico.

El aspecto más resaltante del Tratado de Münster fue la libertad religiosa de los estados confederados lo que obligó a los súbditos a emigrar hacia territorios para profesar el catolicismo o el protestantismo.

En este contexto, Francia se consolidó como una potencia, a la vez que España perdió parte de su poderío.

Pero Europa también era testigo de la Guerra de los 80 años y en la cual España pretendía mantener sus posesiones en Flandes. Finalmente, este conflicto culminó el 24 de octubre de 1648 con la firma del Tratado de Osnabrück, con el reconocimiento de la independencia de Holanda por parte de España.

Paz de Westfalia y la Carta de Naciones Unidas

Como se desprende de lo anterior, la Paz de Westfalia contribuyó en alto grado a sentar las bases para las relaciones internacionales, legado que llega hasta nuestros días.

Un ejemplo de ello lo tenemos en la Carta de las Naciones Unidas, documento suscrito el 26 de junio de 1945, tras finalizar la Segunda Guerra Mundial, y por el cual los países se ciñen al derecho internacional que rige las relaciones entre los Estados.

“La Carta de las Naciones Unidas recoge los principios de las relaciones internacionales, desde la igualdad soberana de los Estados, hasta la prohibición del uso de la fuerza en las relaciones internacionales”, reseña la ONU en su página web.

Es así, como se define el arreglo pacífico de las controversias entre las naciones, la cooperación internacional, el principio de la igualdad de derechos y la libre determinación de los pueblos con miras a la paz universal, así como la soberanía, la integridad territorial y la no injerencia.

La Paz de Westfalia también sentó las bases de lo que se conoció más tarde como política de buena vecindad. Esto se desprende del Tratado de Münster en donde se indica que “los súbditos y habitantes de los países de los dichos Señores Rey y Estados tendrán toda buena correspondencia y amistad (…)  podrán también frecuentar y hacer mansión en los Países uno de otro, y ejercer allí su tráfico y comercio con toda seguridad”.

De acuerdo a Naciones Unidas, el derecho internacional “define las responsabilidades legales de los Estados en sus relaciones entre ellos, y el trato a los individuos dentro de las fronteras estatales”.

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