Los esquemas piramidales se han tornado populares en el último año, aunque no son una innovación. Hoy en día muchos nos encontramos con conocidos o personas de nuestro entorno próximo que nos invita a “invertir” junto con ellos en este tipo de esquemas, pero ¿Qué significa? y ¿Puede realmente ayudarnos a conseguir libertad financiera?
Los esquemas piramidales
Un esquema piramidal es un esquema de negocio que requiere de múltiples participantes; a simple vista los participantes deben invitar a más personas a unirse al grupo de participantes y de esa forma producir beneficios para los participantes que se encuentran por encima de ellos en la pirámide.
El objetivo que los sistemas piramidales persiguen es que el número de participantes crezca constantemente y sea cada vez mayor.
Un esquema piramidal podrá mantenerse mientras existan nuevos participantes en suficiente cantidad como para darle continuidad, por ese motivo es que eventualmente el sistema se satura, disminuyendo los beneficios de los primeros participantes y dejando sin ganancia alguna a los últimos.
Es por eso por lo que este tipo de propuestas está prohibido en los siguientes países: Estados Unidos, Reino Unido, Francia, Alemania, España, Canadá, Rumania, Colombia, Malasia, Noruega, Bulgaria, Australia, Nueva Zelanda, Japón, Nepal, Filipinas, Sudáfrica, Sri Lanka, Tailandia, Venezuela, El Salvador, Irán, República Dominicana, República de China, México, Perú, Chile y Ecuador.
Tipos de esquemas piramidales
Existen dos grandes tipos de esquemas piramidales: las abiertas y las cerradas.
¿Qué es un esquema piramidal abierto?
Se trata de esquemas en los que la mayor parte de los participantes conocen la estructura del negocio y que aun así dependen del desconocimiento de otra parte de los participantes para poder funcionar. Se espera un retorno de entre 800 % y 900 % de un esquema piramidal abierto, aunque sólo para los participantes originales.
¿Qué es un esquema piramidal cerrado?
Un esquema piramidal cerrado es un tipo de organización dirigida por una persona o por una institución que opera como “el director” o dueño de la pirámide, esta persona se presenta como un mediador de inversiones y de esa forma consigue participantes. Sin embargo, no se trata de un sistema de inversiones, sino que funciona como un esquema piramidal abierto, sólo que con el desconocimiento total de los participantes: el dinero circula entre los participantes de la misma forma que en el caso anterior. De este tipo de esquemas se espera un retorno del 150% al 300%.
La SBC dio a conocer una lista de algunas empresas online que trabajan con esquemas piramidales cerrados, revísala aquí
¿Cómo funcionan los esquemas piramidales?
Los esquemas piramidales funcionan haciendo que el dinero de los últimos participantes genere intereses a los participantes originarios. Lo que ocurre con este tipo de organización es que eventualmente se satura la población objetivo y el retorno de dinero disminuirá, dejando a los últimos sin ningún retorno. De esta manera, las pirámides cerradas en muchos países son consideradas estafas, un espejismo de la libertad financiera; las pirámides abiertas son como una lotería, no se sabe realmente quién será el que perderá todo su dinero y quién tendrá algún retorno.
¿Por qué los esquemas piramidales son un buen negocio para algunos?
Los esquemas piramidales pueden tener un resultado feliz para algunos, y devastador para otros. Esto se debe a que en ocasiones las personas se encuentran desesperadas por encontrar la libertad financiera, especialmente aquellas que dependen de la renta básica.
Este tipo de propuestas requiere de muchos participantes para rendir beneficios a los primeros, por lo que los participantes están activamente reclutando más adeptos al esquema.
Debes saber que existen otras formas de mejorar tu vida económica e invertir tu dinero, e informarte adecuadamente antes de entregarle tu dinero a una persona u organización.
Sabemos que el Covid 19 ha tenido efectos negativos en la economía mundial y este tipo de estafas han aumentado gracias al uso de internet. Lo bueno es que también han aumentado las posibilidades para quienes desean superarse. ¡No te desanimes!
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