Autor: Janet Queffelec Padrón
La apertura de una embajada de Barbados en el universo del metaverso, a partir de enero, ha puesto nuevamente sobre el tapete la discusión entre animados defensores y otros tantos detractores sobre la conveniencia de mantener misiones diplomáticas bajo el esquema de la realidad virtual.
Este pequeño Estado del Caribe oriental ha decidido dar un paso adelante para ampliar sus relaciones exteriores, a un bajo costo, y con infinitas posibilidades de proyectar el turismo y los negocios de las finanzas.
El funcionamiento de embajadas, bajo realidad virtual, es una modalidad que inició Maldivas en 2007 y a la que se sumaron posteriormente otros países como Suecia, Colombia, Estonia, Israel, Macedonia del Norte y Filipinas.
Más de una década después, las plataformas virtuales se están consolidando como espacios para la interacción, tras la pandemia del Covid-19. Cabe referir que, desde la aparición de la enfermedad, los Estados y la comunidad internacional en general se han visto en la obligación de mantener contactos por vía remota, por lo que no es descabellado que más temprano que tarde se produzca un auge en la utilización de las comunidades virtuales.
Diversificación a bajo costo
Barbados, que a finales de noviembre de 2021 se constituirá oficialmente en una república, independizándose definitivamente de la monarquía británica, se ha propuesto abrir su primera embajada en el metaverso a principios del año próximo, tras firmar un acuerdo con la plataforma Decentraland. Igualmente, adelanta negociaciones con las comunidades virtuales Somnium Space y Superworld, por lo que se espera que sean varias las misiones diplomáticas que se proyecta la isla caribeña.
Para el ministro de Asuntos Exteriores, Jerome Walcott, la plataforma del metaverso se convertirá en “un foro importante en el que Barbados trabajará con sus socios tradicionales para profundizar sus relaciones en la arena diplomática, así como en las inversiones, negocios, turismo, industria cultural e interacciones entre la gente; Barbados espera recibir al mundo en sus embajadas del metaverso”.
Se trata, entonces, de un plan diseñado por el Estado para diversificar sus relaciones diplomáticas, ahorrando el costo de establecer una sede física en cada uno de los países con los cuales esta nación caribeña busque una mayor conexión y, por ende, ampliar sus servicios consulares, incluyendo la expedición de visas electrónicas.
Actualmente, este país mantiene relaciones diplomáticas con 18 naciones, por lo que el objetivo de las embajadas en el metaverso es llegar a por lo menos 190 países. “Esta es una forma de que Barbados amplíe sus misiones diplomáticas más allá de las 18 que tiene actualmente, con más de 190 países en todo el mundo. Esto nos permite abrir la puerta, utilizando la diplomacia tecnológica, que luego se extiende a la diplomacia cultural: el comercio de arte, música y cultura”, explicó el embajador barbadense en Emiratos Árabes Unidos, Gabriel Abed, en una entrevista con CoinDesk.
Para ello, Barbados se ha comprometido a cumplir con el derecho internacional y la Convención de Viena, en lo que respecta a las relaciones entre naciones.
Otro punto a favor que resaltan los expertos es que las embajadas virtuales permitirán frenar el cambio climático, al bajar los viajes por avión de sus diplomáticos y con ello disminuir las estelas de condensación.
Esta iniciativa será un gran desafío para la diplomacia. En este contexto vale recordar el impacto que significó la creación de la Unión Europea (UE) que en su momento rompió con el paradigma de la diplomacia tradicional entre Estados, para dar paso a la soberanía funcional en la que organismos multilaterales como el bloque europeo tienen personalidad jurídica propia y están facultados para firmar acuerdos internacionales.
Reservas
Frente al entusiasmo de las autoridades de Barbados, se encuentran quienes manifiestan sus reservas por el lanzamiento de embajadas en el metaverso ante posibles riesgos para la seguridad informática y la privacidad de información. A esto se suman las lagunas en torno al acatamiento de los preceptos del derecho internacional.
Para algunos críticos, estas embajadas virtuales son apenas sitios web con utilización de avatares que además son administrados por empresas privadas.
Ucrania apuesta por embajadas remotas
En marzo de este año el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, lanzó un decreto para la creación de embajadas remotas. Aunque no mencionó el entorno virtual, este es un ejemplo de cómo los países buscan maximizar las gestiones diplomáticas en cualquier lugar del mundo y de forma más económica.
«En la era de todo en línea, una institución de este tipo puede realizar casi todas las mismas funciones que la que se encuentra físicamente en el país anfitrión», apuntó Dmytro Kuleba, ministro de Asuntos Exteriores de Ucrania.
No obstante, aclaró que las reuniones diplomáticas y contactos personales continuarán, pero de forma puntual.
Recientemente, el ex primer ministro de Ucrania, Anatoliy Kinakh, declaró a la Agencia Nacional de Información (Ukrinform) que en el Departamento de Estado de Estados Unidos “hay una estructura separada, la Oficina de Diplomacia Electrónica. Un departamento similar está en el Foreign Office en Londres. Estos y otros países han establecido y apoyado desde hace mucho tiempo las actividades de embajadores y embajadas virtuales. Como regla general, se establecen como oficinas consulares en países donde la apertura de una embajada real es temporalmente imposible, por razones de seguridad o financieras”.
